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Malvinas: espionaje, petroleras y soberanía
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El espionaje británico en Argentina; avance de las petroleras y el reclamo soberano a raíz de los últimos acontecimientos, reflexión del director del periódico...
Por Patricio A. Mendiondo, Director Periódico El Malvinense El pasado dos de abril, además de recordar la recuperación de las Islas Malvinas, a nuestros héroes caídos y Veteranos de Guerra, sucedieron varios hechos destacados que merecen especial atención. Por un lado, el avance de las exploraciones petroleras británicas en el Mar Argentino, cercano a las aguas de Santa Cruz, que anunciaron descubrimiento de petróleo y gas. Por el otro, la noticia difundida por TN (Grupo Clarín), del espionaje británico a los argentinos, por la cuestión Malvinas. En el medio, la cadena nacional de la presidente desde Ushuaia. Exploraciones petroleras Premier Oil, anunció descubrimiento de yacimientos en una zona ubicada a 230 kilómetros al norte de las Islas y a 400 de Puerto Deseado, Santa Cruz. Los descubrimientos fueron en la zona denominada "Zebedee" y "Héctor". Se habla de una reserva aproximada de 2.500 millones de barriles recuperables. Para que la campaña británica tenga éxito económico, es preciso que se encuentre el doble de esa cifra, a lo largo de las próximas exploraciones. El costo diario de la plataforma petrolera y de sus buques de apoyo, que se encuentran desde hace un mes en el Atlántico Sur, supera el millón de dólares diario. El anuncio de las petroleras, coincidió con el 2 de abril, sin dudas que no se trató de una casualidad. El objetivo es afianzar el negocio económico y para ello es preciso que la Argentina no reaccione ante los hallazgos petroleros, y a las nuevas invasiones a la Zona Económica Exclusiva (ZEE). Hasta ahora, los británicos cumplen con sus expectativas: Argentina no ha denunciado a Gran Bretaña en la ONU (Asamblea General ni al Consejo de Seguridad) por la violación a su ZEE ni por las nuevas maniobras exploratorias. Desde el año 2010 que se encuentran explorando los ingleses, aguas del Mar Argentino, más allá de Malvinas, y el Estado Argentino no ha hecho ningún reclamo formal, ni ninguna otra acción diplomática de peso para impedir la acción inglesa. Solamente actúa bajo los hechos consumados, sin adelantarse ni impedir las ilegalidades. Ante una invasión a la ZEE, cualquier Estado soberano está obligado a realizar las pertinentes denuncias ante la ONU; pedir explicaciones o expulsar al embajador del país agresor; restringir o romper relaciones económicas y diplomáticas con el país agresor; etc. Nada de eso ha hecho Argentina, ni siquiera una declaración informal de ninguno de los tres Poderes del Estado. Solamente ha hecho denuncias ante la ONU por las reiteradas maniobras militares británicas en Malvinas. Recordemos que...
La estrategia Argentina parece ser más un reclamo para privados que estatal: Se busca llevar a juicio a las empresas petroleras, dejando el reclamo de la soberanía en un segundo plano. Primero se debería reclamar por todos los medios necesarios, la soberanía marítima austral; y luego aplicar sanciones por la exploración/explotación de los recursos.
Los responsables de las empresas petroleras, jamás podrán ser juzgados en la práctica por jueces argentinos. A menos que primero, se resuelva el litigio de soberanía. Es precisamente por ello, que para darle una solución correcta, Argentina debería iniciar las acciones tendientes a ese primer punto; y recién luego imponer a las empresas, las sanciones judiciales que correspondan. Existen varias empresas que actualmente operan en Argentina, que están vinculadas a la exploración petrolera en Malvinas, como Navisur y ABS. Según la ley 26.659 deberían de ser sancionadas. Estas empresas, si pueden ser juzgadas en la práctica por jueces argentinos. Sin embargo, la propuesta de Filmus, es querer llevar a juicio a quien será imposible penar y no denunciar a quienes si se puede sancionar. La complicidad con el negocio petrolero y la inacción del Estado Argentino, es cada vez más evidente. O al menos prueba que la defensa de la soberanía durante el kirchnerismo (a lo igual que durante el menemismo) es totalmente ineficaz, y cada vez se está en peor situación. La situación que sucede con el petróleo, hace poco más de dos décadas se vivió con la pesca. En 1986 no se impidió a Gran Bretaña la expansión marítima para la explotación pesquera, solamente se remitía la Cancillería a querer "imponer sanciones a los buques pesqueros" para desalentar la entrega de licencias. Y en contra medida, otorgar licencias a buques extranjeros. El resultado fue nefasto; jamás se pudo imponer sanciones a los buques de licencias kelpers por carecer de jurisdicción práctica y los buques extranjeros traídos por Argentina resultaron ser más depredadores que los propios ingleses. Hoy día, tras casi 30 años, las licencias pesqueras británicas capturan más riquezas ictícolas que las nacionales. Si el Estado nacional pretende aplicar similar estrategia con la extracción de gas y petróleo, se correrá igual suerte. Y ello porque el eje central debe ser la soberanía, ninguna otra cosa. Espionaje británico a los argentinos Según publicaron TN.com (del Grupo probritánico Clarín), y el diario inglés The Intercept, el ex CIA Edward Snowden, les entregó información secreta, que prueba que el MI6 y la CIA actuaron juntos con el fin de espiar a los argentinos, sobre la cuestión Malvinas. Aunque hasta el momento, la información difundida, no es muy concreta y directa. Tanto la agencia espía británica como la norteamericana habrían estado espiando a ciudadanos argentinos que tuvieran relación con la temática Malvinas, desde el año 2006. Se relata que las acciones "incluían operaciones encubiertas en redes sociales, intervención de comunicaciones militares y de seguridad" con un claro objetivo: "estar informados acerca de los planes de Argentina respecto de las Islas Malvinas e influir en la opinión pública." El material entregado por Snowden (que solo se publicaron cuatro extractos) contiene correos, memos, presentaciones y comunicados internos, que datan desde 2006 hasta 2011 inclusive.
Que la noticia haya sido difundida por TN en la Argentina, da motivos para desconfiar. Pues el canal de noticias y su versión web, dependen del Grupo Clarín, que responde a intereses pro-británicos. Quizá la noticia trate de amedrentar a los argentinos, para que no interfieran en el tema Malvinas: que no hablen del tema en las redes sociales ni colaboren con la temática. Para los que trabajamos todos los días en defensa de la soberanía austral, la noticia no nos conmueve: sabemos que nos espían o interfieren nuestras cuentas o teléfonos. Incluso que se crean cuentas falsas en redes sociales para pretender hacer del reclamo argentino, una débil propuesta. O los continuos intentos de hackeo a nuestras webs... es moneda corriente desde larga data. Por ello suponemos, que la denuncia de TN se centra en aquellos ciudadanos que se muestran más ajenos a la causa y a raíz de este tipo de noticias, pierdan interés en investigar o colaborar en serio con la causa nacional. Si Edward Snowden fuera realmente un verdadero enemigo de la CIA (la agencia estatal más poderosa del mundo), ya habría sido eliminado mucho tiempo atrás. Noticias relacionadas: Continúa la usurpación británica en el Mar Argentino cercano a Santa Cruz Las medidas políticas y económicas necesarias contra UK Inglaterra capturó el doble de merluza que Argentina en el Atlántico Sur Se permite la ilegalidad: sin sanciones por pescar en Malvinas |
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