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08/06/2010

 

Ultraje al país en su bicentenario: El agravio del Reino Unido  

Al no respetar la soberanía argentina ni siquiera en el espacio aéreo sobre el cual Argentina ejerce efectiva jurisdicción, la corona británica agravia al Estado Argentino, a su gobierno, al Pueblo argentino, a Suramérica como región y transgrede las normas del Derecho Internacional aceptado y consagrado en la Organización de las Naciones Unidas, de la que el Gran Bretaña no sólo es parte sino que también miembro Permanente de su Consejo de Seguridad cuya misión principal asignada es -paradójicamente-, el mantenimiento de la Paz.

Por Pablo Crocchi

No debe ‘sorprendernos’ esta nueva ofensa agresiva pues es el modus operandi inglés desde tiempos ancestrales que han hecho merecedor a ese Estado del mote de ‘piratas’ del que se ufanan. Ese modo de actuar ya provocó una guerra que libramos en condiciones desiguales, pero equilibramos con la dignidad y el tesón de nuestros combatientes. Debieron recurrir al auxilio de Chile y de los Estados Unidos para ‘ganar’. Resulta evidente, que como en toda guerra, ambos contendientes ‘perdimos’ en 1982.

Sin embargo Gran Bretaña sufrió mayores pérdidas en términos materiales y de valor monetario, puesto que el costo de un buque, su equipamiento técnico/ bélico embarcado y el adiestramiento de su personal, es mucho mayor que la pérdida de cazas con uno o dos pilotos de combate. Por supuesto que no es lo mismo para un ‘pobre’ aportar diez pesos que para un millonario diez mil. Tampoco fue lo mismo para los argentinos ver caer cubiertos de gloria a nuestros combatientes, que para ellos anotar los números falseados de bajas de sus mercenarios commonwealth.

El diario La Nación, de centenaria trayectoria pro-anglófila, publicó hoy al respecto a la violación del espacio aéreo argentino: el incidente «fue desmentido luego por la Fuerza Aérea Argentina, que señaló en un comunicado que las embarcaciones tenían autorización oficial.

Las naves, dos aviones de guerra y uno que transportaba combustible, no pudieron aterrizar en las Malvinas por condiciones meteorológicas adversas y se dirigieron a Chile para llegar al aeropuerto de Punta Arenas.

En el comunicado, la Fuerza Aérea informó: "En horas de la tarde del miércoles 2 de junio, tres aviones pertenecientes a la Real Fuerza Aérea basados en las islas Malvinas tuvieron que aterrizar en Punta Arenas (Chile) debido a que, por razones meteorológicas, el aeropuerto malvinense se cerró para toda operación".

Agregó que el Centro de Control de Area Comodoro Rivadavia autorizó la ruta de emergencia al aeródromo de destino, en cuyo trayecto sobrevolaron parte de la isla de Tierra del Fuego, en cumplimiento de las normas sobre circulación aérea, que establecen, en circunstancias de excepción, prioridades para el sobrevuelo y aterrizaje de aeronaves cuando deban dirigirse a aeropuertos de alternativa.

La alarma surgió cuando una persona interceptó en Tierra del Fuego una comunicación radial entre los pilotos y la torre de control chilena de Punta Arenas. En la zona patagónica, la Fuerza Aérea Argentina carece de radares.///

En tanto, el gobierno de Chile restó importancia al aterrizaje de las aeronaves británicas y adujo que la operación se debió a "motivos de fuerza mayor", debido a la densa neblina en las Malvinas.»

Cabe destacar que la primera información oficial argentina, argumentó que se dirigían a Punta Arenas para participar de una exposición aeronáutica y que el “aeropuerto malvinense” mencionado en la noticia, se trata de la Base aérea militar de Mount Pleasant, corazón de la llamada Fortaleza Falkland’s.

¿Ofensa histórica o plan de expansión?

La presencia en nuestros cielos de dos aviones de caza Typhoon con otro abastecedor, indica un ejercicio de entrenamiento próximo a la Isla Grande de la Provincia de Tierra de Fuego. Que sepamos, hasta el 2 de junio del 2010 los ingleses realizaban maniobras militares 'sólo' dentro de los territorios usurpados. Ahora las hacen en cielo insular-continental bajo jurisdicción efectiva argentina y surgen una batería de dudas: ¿Acaso preparan bombardeos de apoyo a un futuro desembarco de tropas?; ¿También sus submarinos vigilan nuestras costas sumergidos?; ¿El ‘aeropuerto Lewis’ en el Sur de Río Negro es parte de ese plan de despliegue?, etc., etc., etc.

Nos alertaba José Hernández en su prólogo a una nota escrita por don Augusto Lasserre en 1869: «Los pueblos necesitan del territorio con que han nacido a la vida política, como se necesita el aire para la libre expansión de nuestros pulmones. Absorberle un pedazo de su territorio, es arrebatarle un derecho, y esa injusticia envuelve un doble atentado, porque no sólo es el despojo de una propiedad, sino que es también la amenaza de una nueva usurpación.» [José Hernández, Relación de un viaje a las Islas Malvinas, diario "Río de la Plata", N° 86, 19/ 11/ 1869 - José Hernández Las Islas Malvinas -, Joaquín Gil - Editor, 1952]

Tal vez sólo se trate de una demostración descarada del poderío inglés y de la magnitud de nuestra decadencia, o de un “tanteo” o provocación audaz.

No lo sabemos porque el gobierno argentino miente a su población a través de funcionarios de Estado.

Gatopardismo o pseudo-peronismo commonwealth

La progresiva destrucción moral y material de las Fuerzas Armadas iniciada ideológicamente hace muchos años atrás (tal vez cuando se comenzó a ‘discutir’ si la doctrina de Defensa Nacional debía ser reemplazada por la de ‘Seguridad’), ha sido profundizada y llevada a cabo sistemáticamente por gobiernos legitimados por el voto desde la restauración del Estado de derecho; pero ningunos fueron tan eficaces como el del presidente Menem o el actual, curiosamente camuflados ambos con maquillaje peronista.

No tenemos el “peronómetro” pero sabemos que todas las administraciones auténticamente justicialistas gobernaron siempre con planes Trienales o Quinquenales.

Este disfraz es una verdadera extravagancia, pues el general Perón, ideólogo del GOU e impulsor de las industrias y del trabajo; estadista venerado y consagrado por su Pueblo, quien generó un Movimiento nacionalista y social humanitario enmarcado en los movimientos independentistas del mundo de la post-guerra, es justamente el reverso de estas políticas decadentes.

Es más, el Justicialismo nació del riñón de la Revolución del ’43 que finalizó con la llamada Década Infame. Si ésa década fue infame ¿cómo deberíamos llamar a estos 28 años adónde la acumulación de capital en manos de muy pocos se acentuó generando una nueva oligarquía de nuevos ricos con novedosas y alevosas prebendas?; donde se extranjerizó la economía a nivel escandaloso y se desmantelaron las industrias y las empresas del Estado dejando a los trabajadores sin sus fuentes de trabajo; donde el Parlamento fue coimeado para derogar de la Ley de Contrato de Trabajo; donde se modificó el capitulo de delitos económicos del Código Penal para no encarcelar a los directorios de los bancos privados después del vaciamiento del Corralito de Cavallo; donde las concesiones de los canales de TV o de los pozos de explotación petrolífera se prorrogan sin licitación; donde las empresas mineras, extranjeras siempre, tienen una legislación que privilegia sus ganancias por sobre el interés público; etc., etc.

Resulta evidente que este “maquillaje” o “discurso peronista” es sólo un recurso para obtener votos en la ciudadanía usufructuando el prestigio de los fundadores del Justicialismo y el de sus militantes posteriores.

Como dijo alguien: «Muchos compañeros vendieron su alma por “chirolas”, otros por fortunas, y otros simplemente la perdieron en algún recodo de la vida; pero quien alguna vez haya rugido con convicción aquello de “la sangre derramada no será negociada” pensando en nuestros caídos, comprenderá a quien hoy lo dice en silencio para sí mismo pensando en los argentinos caídos en la guerra de Malvinas.»

Perón advirtió sobre el gatopardismo revolucionario que decía querer “cambiarlo todo, para que nada cambie”.

El insulto inglés y el Ministerio de Indefensión

En ese contexto la actual ministra de defensa se ufana de no tener hipótesis de conflicto. Es decir, que no se contempla la posibilidad hipotética que nuestro país sea atacado a futuro en ningún frente, ya que su cartera es Defensa y no ataque. Según su razonamiento, optimista por cierto, la costosa estructura bajo su responsabilidad sería absolutamente inútil. Dado lo cual, su propio sueldo y viáticos estarían de más ya que nada ni nadie sería útil a la sociedad en la defensa del país. Pero sucede que en la realidad una enorme superficie de nuestro territorio insular y marítimo está usurpada y ocupada militarmente por Gran Bretaña, y otra aún mayor es manifiestamente pretendida y ofrecida como propia a la Unión Europea.

La ilusión exorcizar guerras y ataques por la carencia de hipótesis de conflicto parece un intento patético de tapar el Sol con la mano, que resulta equivalente a “meter la cabeza en el hoyo, como el avestruz”. Como si un Estado pudiese elegir a su atacante y el momento de ser atacado.

Mucho peor resulta hacer mentir a oficiales de la Fuerza Aérea aprovechando la investidura de mando en una estructura vertical del Estado y la tan cuestionable “obediencia debida”, o la debilidad de carácter de algún oficial mal formado que se habría prestado a la maniobra des-informativa de prensa, lo cual desprestigia a su fuerza y agravia la memoria de los pilotos caídos en 1982.

Si fuese verdadera la última versión dada por el “Centro de Control de Área “Comodoro Rivadavia”, que dice «autorizó la ruta al aeródromo de destino, en cuyo trayecto sobrevolaron parte de la Isla de Tierra del Fuego, cumpliéndose con lo establecido por la normativa vigente sobre circulación aérea por parte de la Organización de Aviación Civil Internacional para estas circunstancias de excepción», será causal de sumarios puesto que se basan en normas vigentes para la Aviación Civil y las tres aeronaves inglesas son militares.

Por otra parte si alguna de ellas estaba en emergencia podrían haberlos invitado a aterrizar en alguno de los aeropuertos de región, como Ushuaia, Río Grande o Río Gallegos, adonde podrían haber realizado una requisa y la correspondiente investigación con personal argentino.

No se entiende porqué el gobierno en vez de pedir explicaciones, citar a la embajadora británica y exigir desagravio al pabellón nacional, decide mentir para cubrir a “su graciosa majestad” y a sus esbirros, en actitud cómplice con el ocupante. Si el cuento de la exposición aeronáutica en Punta Arenas era lamentable, el del llamado a Comodoro Rivadavia insulta la inteligencia de la población. Las mentiras publicadas reflotan dudas sobre el dictamen del incendio del Rompehielos Irízar ¿fue casual o intencional?; ¿estuvo la mano secreta de Gran Bretaña en el hecho..? Algún día lo sabremos.

La incursión de aviones de combate británicos en nuestro espacio aéreo puso en evidencia que nuestro sistema defensivo y de control está destartalado o es inexistente. Se falta así a uno de los mandatos básicos de la Constitución Nacional enunciado en su Preámbulo: ‘Proveer a la defensa común’, lo que llevaría a pensar que se está cometiendo el delito de ‘Falta a los deberes del funcionario público’ contemplado en el Código penal. Ya el sonado caso del aeropuerto Lewis próximo a la costa atlántica de Río Negro llevó pensar lo mismo.

Este accionar de la Ministra de Defensa compromete al Poder Ejecutivo en su conjunto y por supuesto a la señora Presidente de la Nación como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, puesto que su Decreto N° 256 del 2010, jamás implementado en la práctica, fue puesto en absoluto ridículo.

La lógica pragmática de nuestros políticos

Nuestros políticos tal vez crean que el arquetipo actual del ciudadano argentino sean Ricardo Fort o Pachano y gobiernen para ellos. Tal vez presupongan que a ellos no les interesa la cuestión y por tanto no interesa a nadie y es como que no existiese. Entonces no entendieron nada del porqué la masiva adhesión y concurrencia a los actos de celebración del bicentenario de la Revolución de Mayo; de porqué el aniversario del nacimiento del Estado argentino sacó de su letargo a multitudes.

Es esencial en nuestro sistema republicano, el principio de la publicidad de los actos del Estado y el de la responsabilidad de los funcionarios públicos, como lo manifiesta nuestra Constitución Nacional. Su importancia resulta vital para que los ciudadanos y habitantes puedan realizar un efectivo control de la gestión de Gobierno.

Pareciera no perturbar a nuestros gobernantes el hecho en sí, sino que haya trascendido a la prensa. Un concepto adjudicado al ministro de propaganda de Hitler y muy vigente hoy en el mundo desarrollado, dice: “No importa lo que haya ocurrido, sino lo que la gente crea que sucedió”, es decir, su efecto político. Claro, para los pragmáticos, lo que importa son los votos y en Tierra del Fuego hay muy pocos. Se indignan, pero no con los ingleses que nos sobrevuelan con sus aviones de guerra, sino con quienes publicaron la verdad.

Mientras el ocupante se afirma militarmente en nuestros suelos del Sur y planifica cómo explotar pozos petrolíferos en el mar a 14.000 Km. de distancia de Londres, en nuestro Parlamento se discute sobre el síndrome de hemorroides de la comunidad homosexual nativa como una cuestión de Estado.

Pepito Cibrián dijo el 1° de junio de 2010 al Senado de la Nación:

«Batallón de mariquillas de soldados que han venido
a mariquillearme con cien maricas plomizos
de pólvoras los maricas, y de maricas sus tiros.»

Su profética advertencia nos inspira a agregar algo que faltó o quedó en el tintero:

Para estar bien agiornados hay que amputarse los falos!

Marica la presidenta aunque parezca una afrenta;

mariquita ese ministro y maricón aquel otro..!

(y pensar que hace unos años le llamábamos “el potro”)

Maricazos los del Pro; maricas los de Lilita,

Mariconazo el tal Cleto aunque sea mendocino

pues si Néstor lo votó por algo lo habrá elegido

Maricas nuestros políticos de maricas desatinos

que en vez de cuidar lo suyo lo entregan al enemigo

Cipayos sodomizados, genuflexos diputados

¿ya no hay republicanos en los miembros del Senado?

Maricones el fulano, el sultano y el mengano

y no es peyorativo decir ‘puto’ en castellano

porque el ‘gay’ traducido es ‘guey’

así escrito y pronunciado

‘Puto’ dice el diccionario y deberían decirlo

en la TV y en los diarios

El puto activo es machista y prefiere siempre a machos

en sodomitas conquistas donde triunfan los más fachos;

el pasivo, masoquista, elige cargar por popa

y hasta se arranca la ropa cuando la carne está lista

Hay maricas amargados, maracas alborozados,

Son legiones de maricas, parecieran demasiados

Maricas autoritarios y muy amplios comilones;

maricas adinerados o maricas muy, muy pobres:

a todos los une el ano con maricas hemorroides

Los maracas refinolis y hasta maricas tumberos

sabrán muy bien con qué untarse

cuando les pica el ahujero

Maricón el juez penal aunque prefiera en presidios

practicar el sexo oral con presos por homicidio.

Marica sacerdotal fue el obispo Mariconne

que filmaba el remisero mariconeando sus dones.

Funcionarios mariquitas de nuestra cancillería

que por ir a una embajada hacen muchas porquerías

La queen es reina marica; marica toda su prole,

maricones sus soldados; mariquitas disfrazados

sus rotarianos masones

Maricas usurpadores y anglosajones maricas:

cuidensé de los maricas que habitan éstas regiones

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